El concierto, que sirvió de presentación oficial en Madrid del Festival Vila Rock ’09, comenzó a las 19.30, con Habeas Corpus, cosa que nos sorprendió, pues pensábamos que sería NPFNO quien rompiera el hielo. Nadie es profeta en su tierra, y este grupo que en el norte cierra festivales, aquí comienza a tocar a estas horas, aunque como veremos luego fueron los mejor parados de la noche.
La primera canción que nos tenían preparada fue «Ni Una Más», y es en ese preciso momento cuando te das cuenta de lo pequeño que se hace el escenario de la sala para un grupo con una puesta en escena tan potente como ésta.
Fue un concierto muy completo, donde no faltaron canciones tan conocidas como «A La Izquierda De Dios» cantada por todos los allí presentes o «Mano De Hierro» también muy coreada. No perdieron la ocasión de tocar algunas de su último disco: «Después Del Último Adiós» o «La Riqueza Es Un Crimen». También tuvieron tiempo de ponerse tiernos con la canción «Distancia», momento que el guitarra (Mr. Chifly) aprovechó para dedicar la canción a su pareja, aunque lo más tierno de la noche fue cuando M.A.R.S. les dedicó el concierto a ambos, como felicitación por su próxima paternidad. (Muchas felicidades de nuestra parte a ambos). También felicitaciones al bajista Víctor ZINC por su recién acabada carrera de derecho, que a veces cuesta más que un embarazo y un parto juntos (por lo menos dura más).
El concierto tuvo muchos momentos de caña, como cuando ante un sencillo gesto del cantante (con su dedo indicaba un giro) el público se desbocó a bailar ska siguiendo un patrón circular (dando la impresión de colarse todos por el sumidero), o cuando justo antes de «Mano De Hierro» consiguió separar la sala dejando un pasillo central, como si de un renovado Moisés se tratara, y encarar así a ambos frentes.
En resumen, un concierto que estuvo más que bien, mucha caña, mucha reivindicación y mucha implicación con su público.
Ni Por Favor Ni Ostias llegaron a las 21.00, con el público bastante caldeado. Un punk muy clásico, chapado a la antigua, que trae a la memoria a bandas como La Polla, de la que versionearon el tema «Ellos Dicen Mierda», una de las últimas del efímero concierto. Digo efímero porque apenas duró 40 minutos, en los que tocaron hasta una versión de «Alabaré» famoso entre catequistas y chicos del coro de la parroquia.
Punk de los de siempre, que a veces se echa de menos, en estos tiempos de tantos malabarismos musicales. La fórmula sencilla que une melodías bailables y cañeras con letras que van al grano, a dar dónde más le duele a esta sociedad hipócrita.
Algo así podemos decir de la banda que sigue, y que tengo que confesar está entre mis favoritas del panorama de rock estatal. El Último Ke Zierre empezó a las 22:00. Cuando comenzaron los acordes de «El Conde Crápula» ya no pudimos parar de bailar unas canciones muy escogidas, de lo mejorcito del grupo.
A clásicas como «Mal Camino», «Altero Mi Cuerpo», «Vuelta Al Infierno» se intercalaban temas del disco «Quemaste Tus Alas De Ángel» como «Fausto Fue A La Habana», «Enganchados» y «Canto». Aprovecho para contar que este tema incluye los últimos versos que Víctor Jara escribió antes de morir a manos de los milicos fascistas del golpe de estado chileno, en el estadio que presenció su tortura, como la de muchos otros. Este sufrimiento descrito en el último poema «Estadio Chile» es al que se refieren EUKZ cuando dicen: «lo que tuvo que pagar». Para mí esta información fue un verdadero descubrimiento y un poquito de historia no nos viene mal.
A lo largo del concierto tuvimos que sufrir a unas cuantas fans con ganas de protagonismo que se enganchaban como lapas pesadas a los componentes del grupo. Cualquier ocasión fue buena para dar la nota, y para dejar al cantante sin camiseta, y eso es algo que muchas no le perdonaremos… Los espontáneos no dieron demasiados problemas a la organización, ni al desarrollo del concierto.
El sonido anduvo regularcillo hasta que más o menos a la mitad del concierto, mientras sonaba la canción «Tus Bragas» cambiaron una de las guitarras, y todo fue mucho mejor. La pena es que duró poco tiempo, pues siete canciones más tarde se acabó lo que se dió.
EUKZ fueron los perdedores de esta noche (¿o fuimos nosotros?) pues tras una breve e intensa hora de concierto dejaron en el tintero una importante reserva de canciones que a pesar de aparecer en el set-list no llegaron a sonar. «Insurgente», «Por Domesticar», «Camino De Rosas», «Tu Perro» y «Soldadito Español»… emblemáticos temas que estaban preparados para los bises, y que fueron desafortunadamente tragados por las prisas de una sala con horarios apretados.
Nosotros nos quedamos a cara de perro cuando «El Feo» se despidió con un «Nosotros nos morimos de ganas» ante las peticiones de bises de un público entregado a los que una hora de concierto apenas había satisfecho. Afortunadamente sí hubo tiempo para acabar con mi favorita entre las favoritas «Escupiré Jodidos».
En fin, buen rollo, bastante buen sonido, público y grupos entregados a la música y poco tiempo para disfrutar de tres grupos sólidos del panorama musical estatal.
VIQUI QUINTANO
